Si eres de los que se han preguntado a qué huelen los recuerdos te interesa saber que no estás solo. El periodista Fernando Ruiz-Goseascoechea, ha intentado darle respuesta en su última obra, ¿A qué huelen los recuerdos? Marcas que dejan huella (2020), tras hacerlo en el ámbito del paladar con Los sabores de la memoria (2018). La respuesta es un singular recorrido por la historia de los productos y marcas presentes en nuestros hogares durante décadas, que el autor trenza con sus recuerdos, nostálgicos y olfativos.
Ruiz-Goseascoechea pone su granito de arena esta vez, contra el olvido de los recuerdos olfativos. Porque, como afirma en el prólogo, el olfato, es “una capacidad esencial en el ser humano”, una máquina del tiempo que nos permite recuperar momentos únicos de nuestras vidas, cada vez más desodorizadas. Y porque “el olor y el sabor perduran mucho más, y recuerdan, y aguardan, y esperan, sobre las ruinas de todo, y soportan sin doblegarse en su impalpable gotita el edificio enorme del recuerdo”. (Marcel Proust, Por el camino de Swann).